Qué es el trastorno negativista desafiante en niños y adolecentes
El trastorno negativista desafiante en niños y adolescentes se presenta antes de los 8 años de edad y afecta particularmente a los varones. Se manifiesta en un recurrente comportamiento desafiante, hostil y desobediente ante cualquier figura adulta de autoridad.
Los signos más frecuentes en manifestarse son:
- Retar a los adultos, rompiendo las normas que les impongan.
- Estar irritantes, resentidos y usar lenguaje obsceno.
- No cumplen con sus deberes, utilizan la manipulación, el engaño y la mentira para lograr sus objetivos.
La etapa de la escolaridad es en la que más se acentúan los síntomas. El autoestima baja, el lenguaje soez y la baja estabilidad emocional se hacen más notorios en esta etapa; así como los conflictos con los padres, compañeros y profesores.
No se ha dado aún con la causa exacta que produce este trastorno psicológico en los niños, pero se han estudiado diferentes teorías. Una de estas es la teoría del desarrollo.
Esta puntualiza que los trastornos se manifiestan en los niños o niñas a partir del año o dos años de edad, por lo que pierden la capacidad de ser independientes, siendo incapaces de separarse de la persona que ha cumplido en su corta vida la función materna.
Otra es la teoría del aprendizaje. Señala que el comportamiento negativo es debido a las conductas negativas de las personas que están en su entorno y ejercen influencia sobre ellos y su formación; es decir, quienes los maltratan con gritos y castigos generan que los niños se tornen violentos y rebeldes.
La lucha por el dominio, traducida en violencia hacia el individuo en desarrollo, modifica el modo en que este se relaciona con el mundo.
El trastorno negativo desafiante se manifiesta en obstinación constante, resistencia a las mandatos y resistencia a comprometerse acceder o negociar con adultos o compañeros.
Estas son las causas psicosociales de riesgo
- Herencia de enfermedad psicológica de alguno de los padres como el trastorno del estado de animo
- Entorno familiar disfuncional.
- Situación social nociva
- Educación o entorno académico impropio.
En Ipsia Psicólogos, en Madrid, apostamos por terapias no invasivas. Los objetivos de las terapias cognitivo-conductuales son enseñar al niño a recibir instrucciones y a no actuar impulsivamente, modificando las respuestas emocionales, los pensamientos y los comportamientos negativos, asociados con los trastornos psicológicos; logrando que el niño cultive nuevas relaciones interpersonales sanas. Y se incorpore a su familia y sociedad naturalmente.
Existen riesgos puntuales en los niños que no son tratados a tiempo o adecuadamente:
- Aumento de conductas impropias
- Repudio de los compañeros o adultos.
- Fracaso o deserción escolar.
- Inclinación prematura a la ingesta de alcohol o sustancias estupefacientes.
- Sexualidad precoz.
- Entorno familiar insidioso.
- Tabaquismo a muy temprana edad.
- Simular siempre ser la víctima.
- Los síntomas psicológicos varían según la edad y la gravedad del trastorno.