Ludopatía o adicción al juego
La ludopatía o adicción al juego es uno de esos problemas que crecen sin ser detectados. El Juego de azar es un desafío al destino en el que algunos individuos ponen sus esperanzas de cambiar repentinamente el futuro a su favor.
La adicción al juego es un desorden adictivo determinado por el descontrol en la interacción con los juegos de azar. El juego de azar ha estado en nuestra civilización y ha pasado de generación en generación ya que ha sido gran pasión para muchos.
El juego de azar es psicológicamente un reto al destino; uno en el que las personas invierten su dinero y su tiempo para, por lo menos, experimentar una conquista contra el dilema de la pérdida, pesar del desconsuelo que conlleva la incertidumbre; convirtiendo así un desconcierto con la realidad, en una ambición de escape de la cotidiana monotonía.
Es una urgencia incontrolable por apostar y jugar sin medir consecuencias.
Ludopatía o adicción al juego ¿qué son realmente?
La Ludopatía es normalmente considerada un método de recreación y esparcimiento, pero cuando deja de serlo e involucra ansiedad y descontrol la persona pierde su autonomía y desata un descontrol irrefrenable, y lo que era diversión se pasa a ser un trastorno psicológico de adicción.
Psicológicamente las personas pierden la noción del riego en las apuestas y no les importa el dilapidar continuamente su dinero, llevándolos irremediablemente a problemas de índole económico y sociales sin contar con el estrés psicológico que requiere el apaciguar de cualquier forma su adicción por los juegos y apuestas.
Este trastorno lleva a estas personas a no poder lidiar con la ansiedad y la depresión que en muchas ocasionas ponen en riesgo la vida del adicto.
¿Cuáles son las características de una persona que sufre ludopatía o adicción al juego?
- Continua compulsión por hacer apuestas y búsqueda irrefrenable por buscar dinero para seguir jugando.
- Pierden la proporción de sus apuestas esto incluye dinero y tiempo.
- Aumentan desmesuradamente la frecuencia de las apuestas todo para complacer su adicción.
- Se torna impaciente e irritable al no poder jugar.
- Pierde constantemente dinero creyendo que aumentando las apuestas podría recuperarlo cayendo siempre en un círculo vicioso.
- Pierde su entorno familiar y social ya que dedica su tiempo completamente al juego.
- En su desesperación por la obtención del dinero llega a caer en actos ilegales como fraude, estafa y falsificación para poder financiar su adicción al juego.
Es necesario que al reconocer alguno de estos síntomas se acuda a un profesional especializado en psicología de adicciones.
Es realmente difícil que un adicto al juego (Ludópata) llegue a aceptar ayuda se requerirá de mucha orientación para lograr inferir en su recuperación. En el centro de psicología IPSIA ubicado en Madrid podrás encontrar los especialistas que logren un resultado positivo en tu tratamiento.
Un jugador obsesivo al igual que un adicto a las drogas genera una gradual autodestrucción, la gravedad de esta adicción repercute en todo su entorno tanto físico, familiar de trabajo, vida social, problemas jurídicos y financieros que solo un equipo de psicólogos especializados puede lograr de manera gradual su regeneración intelectual y conceptual ante la conducta descontrolada ante la relación de juegos y apuestas.